El frío y la lluvia de ayer en Urkiola no deslucieron la cita anual de la familia misionera que acudió fiel al Santuario pasadas las 10:30h. Tras los saludos iniciales en Lagunetxea, el equipo de Urkiola nos brindó una cálida bienvenida poniendo en valor todo lo que han aprendido de los misioneros con los que han convivido durante todos los años que llevan en Urkiola. Lo viven como un tesoro, y sienten que tienen que compartir toda esa riqueza.
En la asamblea, un vídeo recogía los saludos de las misioneras y misioneros desde los diferentes países. También se pudieron escuchar testimonios que compartieron sus reflexiones acerca de la brecha Norte-Sur o sobre el caminar de las iglesias de África y América en los últimos años.
Tomaron la palabra Benjamín Respaldiza y María Jesús Olarte que han visitado recientemente el hogar de niñas en Luanda (Angola). Por su parte, José Luis Ormijana y José Ignacio Iturmendi se complementaron ofreciendo información de los misioneros y misioneras que siguen al pie del cañón de R.D. Congo y Juan Cruz Juaristi se refirió a la situación que vive Ruanda cuando han transcurrido 30 años del genocidio. Aunque entre la población se van dando pasos, el camino hacia la verdadera reconciliación es difícil. Paulino Ordax, recién llegado de Ecuador compartió algunas pinceladas de la situación del país y recordó parte de su trayectoria misionera en los 15 años que ha vivido en Ecuador . Ahora se prepara para la nueva etapa en la diócesis de Bilbao.
Para cerrar el apartado de testimonios, Emiliano Martínez, salesiano afincado en Vitoria y llegado recientemente de África, reflexionaba acerca del modelo de misión que se ha llevado a cabo a partir de sus 30 años como misionero en diferentes países de África del Oeste.
A la izquierda Emiliano Martínez, a la derecha José Ignacio Iturmendi
La asamblea finalizó con la proyección de un breve informe sobre lo que ha sido este curso para Misiones Diocesanas.
La celebración de la eucaristía en el santuario estuvo presidida por el delegado de misiones de Vitoria, el misionero alavés Javier Martínez Bujanda. Con anterioridad el altar había sido adornado con mimo con las calas que se recogen en este tiempo en Urkiola
Una comida de confraternización en Lagunetxea puso el broche de oro al encuentro.
Benjamín Respaldiza y Mª Jesús Olarte,
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