Durante los meses de verano recibimos la visita de misioneras y misioneros que están pasando unos días de vacaciones y se acercan a las delegaciones de Misiones para saludarnos. A lo largo del año nos mantenemos en contacto con misioneros y misioneras de diferentes congregaciones religiosas gracias al envío de la revista Los Ríos, en campañas como el Domund, en Navidades o por el apoyo a los proyectos,… Por ello valoramos mucho la posibilidad de vernos, de conocernos más.
Estos días ha pasado por la delegación de Bilbao Begoña Clares, misionera de la institución Teresiana que está en R.D. del Congo. Toda una vida dedicada a la Misión. A sus 84 años transmite con ilusión la tarea que está llevando adelante en la diócesis de Kikwit, una diócesis tan grande como Portugal, con más de un millón de habitantes, pero que no cuenta ni con electricidad ni agua canalizada, según nos comentaba Begoña. Se dedica principalmente al ámbito de la educación, además de la tarea pastoral en la diócesis.
También estos días hemos tenido la oportunidad de estar y compartir con otras dos misioneras que llevan toda la vida en África y en concreto en la República Democrática del Congo. Maribe Bengoetxea, mercedaria de Berriz, que trabaja en el ámbito educativo en el colegio que tiene la congregación en Likasi y Petra Barrientos, Carmelita misionera que trabaja en el ámbito sanitario, en el hospital que dirige la congregación en Bunkeya.
Ambas han trabajado con los misioneros diocesanos en el Congo, y cuando están de vacaciones siempre se acercan a la reunión que se organiza desde las fundaciones Goicouria y Mufunga, con los misioneros y misioneras que han estado en el Congo. Maribe y Petra compartieron algunas novedades sobre las tareas que llevan a cabo en la Misión, pero también mostraron su preocupación sobre la realidad política y social del país, el incremento de la corrupción. Por otro lado, compartieron sus impresiones acerca de la reciente visita al país del obispo Joseba Segura.
En pocos días hemos podido conversar con tres mujeres misioneras veteranas, comprometidas con los pobres y que continúan trabajando con ilusión, con fuerza, con esperanza.
Todo un ejemplo para nuestra iglesia.
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