Juan Carlos Pinedo prosigue con su viaje por Ecuador, con motivo de sus Bodas de Oro sacerdotales. Emoción, encuentros y recuerdos en estas semanas en las que está volviendo a recorrer lugares en los vivió durante sus muchos años como misionero en ese país.
Ayer estuvieron en la Trapa de Salcedo, en Latacunga, como a 3300 metros sobre el nivel del mar. El anterior arzobispo de Portoviejo, Lorenzo Voltolini, al que le une una gran amistad, renunció hace unos años como obispo y entró a la Trapa. «He ido a saludarlo con dos obispos eméritos amigos, de El Oro y de Riobamba, Nestor Herrera y Víctor Corral. Ahí estamos los 4 en la foto delante del convento de la Trapa de Salcedo. Por el camino, hemos pasado junto al volcán Cotopaxi que está en erupción estos dias; de momento, solo lanza vapor de agua y cenizas. La gente está bien alerta».
Esta semana, Juan Carlos también ha estado con varios responsables del Fondo Ecuatoriano Populorum Progressio (FEPP) «El FEPP -explica Juan Carlos– trata de dar respuesta económica, de formación y de vida comunitaria a los grupos montubios, indígenas, actos y mestizos del país, acompañando a los más pobres.
Ha saludado a Javier Villaverde, que fue compañero suyo en Quevedo, durante sus años como misionero y que, posteriormente pasó a colaborar con el FEPP, donde ha sido jefe de proyectos hasta su jubilación y ahora sigue colaborando de forma voluntaria.
En la imagen, de izquierda a derecha, Javier Villaverde, Luis Hinojosa, director ejecutivo del FEPP, Mons. Nestor Herrera, presidente y Juan Carlos Pinedo.
Peli Romarategi en la memoria
Mons. Nestor Herrera estuvo invitado hace un año para celebrar los 100 años de Peli Romarategui. Esta semana, el día 30, Peli hubiera cumplido 101 y celebraron una misa en su recuerdo en Quito.
En la imagen, Juan Carlos, con Mons. Herrera.
Deja una respuesta