El presbítero Juan Carlos Pinedo, misionero durante muchos años en Ecuador y compañero de Peli, pasa unas semanas en dicho país, desde el que nos transmite su cariño hacia Peli “del que es hasta un poco pariente”, dice y al que siempre estuvo muy cercano, «a lo que él representaba».
Encuentro de «Manabas», grupo misionero que a lo largo de los años han coincidido en Manabí, celebrando el 100 cumpleaños de Peli en Urkiola, en febrero de 2022. Juan Carlos Pinedo es el segundo por la derecha.
Estos días en esas tierras que tanto quiso y en las que tanto quisieron a Peli tienen varias celebraciones en su memoria
Pinedo destaca que Peli fue una persona entregada totalmente a su trabajo, “muy cercana al mundo de los pobres y con una sensibilidad artística muy importante. Me alegro de que con motivo de sus 100 años, se le hicieran una serie de homenajes. Se reconoció su trabajo. Me parece que nosotros contribuimos a ello. Estamos contentos de que incluso en vida se reconoció esa labor de un laico, de una persona entregada, de una persona que vivía la fe comprometida con los más pobres y que realmente nos muestra un camino. Es luz para nosotros, así que nosotros en este momento y con la pena de la despedida decimos: Goian bego!
Deja una respuesta