¡Feliz Navidad!
Sigamos sembrando, compartiendo, anunciando la Buena Noticia, con la Esperanza puesta en el Reino de Dios, que vamos construyendo entre todas y todos con pequeños pasos.
LLEGARÁ UN NUEVO DÍA
Llegará un día en el que vivir no sea una pesada carga, que doble las espaldas y sofoque los corazones, sino una asombrosa experiencia de plenitud para todas las personas, sea cual sea su origen, color, país o religión.
Llegará un día en el que la igualdad no esté en entredicho ni necesite discriminación positiva, sea cual sea la cultura, la condición social, la patria, la riqueza o el sexo de las personas.
Llegará un día en el que las fronteras desaparecerán, la justicia florecerá y todos los seres humanos podremos movernos, sin controles ni tarjetas, de acá para allá, como en nuestra propia casa.
Llegará un día en el que la fraternidad será la mejor carta de ciudadanía, de dignidad y de respeto, y todas las personas serán respetadas.
Llegará un día en el que podremos convivir, dialogar y enriquecernos, amar, compartir y criticarnos, soñar, trabajar y cantar, y ser diferentes sin excluirnos en la mesa, en el corazón y en la historia.
¡Pronto llegará ese nuevo día, Señor, si proclamamos sólo palabras de gracia!
¡Ya se anuncia! (Floren Ulibarri)
ZORIONAK de parte de todos los misioneros y misioneras de nuestras diócesis vascas, que están por el mundo!
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