Prosigue en Ecuador, el viaje del obispo de Bilbao y responsable de Misiones Diocesanas Vascas, Mons. Mario Iceta; junto al ex misionero y Vicario Episcopal de Bilbao, Antón Rey y la Delegada de Misiones de Bilbao, Feli Martín.
Mañana jueves, la delegación tendrá un encuentro con los misioneros vascos que se encuentran allí trabajando, en el que intercambiarán impresiones y tomarán el pulso a la situación, “pero además les trasladaremos nuestro apoyo y satisfacción por la labor que realizan”, explica Antón Rey. La cita concluirá con una Eucaristía. Además, este pasado domingo, día 4, el Obispo presidió una Eucaristía en la zona donde realiza su servicio el misionero de la Diócesis de Bilbao, Juan María Bautista.
Por otro lado, acompañados por el Arzobispo de Manabí, Mons. Lorenzo Voltolini, el grupo ha visitado varias de las zonas afectadas por el seísmo. “En Portoviejo impresiona la desolación, los edificios demolidos, las zonas fantasmagóricas, las parcelas vacías, sin luz, sin vida”, relata Feli Martín, tras las visitas.
El grupo también ha visitado la iglesia de Pedernales -en las imágenes que acompañan a estas líneas- y han visto el estado en el que ha quedado el mosaico de Peli Romarategi. En Canoa, la iglesia ha quedado totalmente destruida, solo se ha mantenido mantiene en pie el campanario.
A continuación, publicamos algunas de las fotografías que han ido enviándonos de Pedernales y el campanario de Canoa.
Antes de partir, Antón Rey explicaba las razones principales de esta visita “en un primer momento, y cuando ocurrió la tragedia (más de 600 muertos y 12.000 heridos, 7.000 inmuebles destruidos y cerca de 3.000 afectados de cierta gravedad…) mostramos oficialmente nuestro dolor y consternación por medio de diferentes comunicaciones escritas y telefónicas… así como con el envío de ayuda económica, a través del Arzobispado de Portoviejo, para diferentes proyectos: primeros auxilios, construcción de casitas para los afectados, becas estudiantes…
Ahora, y ante la demanda de las gentes de allá, toca hacernos presentes para seguir mostrándoles, de manera oficial, nuestra solidaridad, nuestro cariño ante la pérdida de sus seres queridos y animarles en la reconstrucción de sus casas, negocios, infraestructuras… También queremos ver en qué podemos seguir ayudándoles de forma organizada y por los canales establecidos entre las Delegaciones Diocesanas de Misiones Vascas y Cáritas Euskadi y la Arquidiócesis de Portoviejo”.
Ayudas
Las tres diócesis vascas, a través de Cáritas y Misiones diocesanas han recaudado una ayuda económica de unos 600.000 €. destinadas a las zonas más afectadas. El obispo de Bilbao agradece la colaboración de todas las personas que se han volcado en ayudar “tanto económicamente como realizando labores solidarias” en las zonas afectadas. Quien desee colaborar económicamente puede hacer su aportación en los números de cuenta que aparecen en la página de inicio de esta misma web.
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