Ha concluido el viaje a la República Democrática del Congo que ha realizado Don Mario Iceta, obispo de Bilbao y delegado para las Misiones Diocesanas Vascas, acompañado por el vicario de Bilbao, Antón Rey y la delegada diocesana de Misiones de Bilbao, Feli Martín, para visitar al misionero diocesano Xabier Goicouria y conocer de primera mano las misiones y proyectos de Misiones diocesanas en ese país.
Recién llegados y aún sin tiempo de analizar sosegadamente el impacto que les ha producido la experiencia, Feli Martín resalta que “ha sido un viaje intenso y de muchas emociones”.
El obispo ha conocido las misiones de Panda Likasi, donde se encuentra el misionero vizcaíno Xabier Goicouria y las misiones de Bunkeya, Kansenia y Mufunga, todas ellas pertenecientes a la diócesis de Lubumbashi: han visitado los proyectos actuales y conocido diversos apoyos que se realizan en estas misiones.
Entre otras actividades y tareas, han visitado el hospital en Kansenia, gestionado por las religiosas Terciarias Capuchinas; han estado con la comunidad de Betania, de religiosas que cuidan de niños y niñas abandonados: les dan acogida, educación y forman con los niños una familia. También han celebrado misas en Mufunga, en la comunidad de Kabulumbu, a tres horas y media de Panda y han visitado al Arzobispo de Lubumbashi, Mons. Jean Pierre Tafunga Mbayo.
Iñigo Iriarte, de la Fundación Matía Pardo, que se encarga de los proyectos y apoyos al Congo a través de las fundaciones, viajó el 16 de junio con Luis Mari Gerrikagoitia, -misionero vizcaíno en el Congo durante muchos años-, para realizar las tareas previstas de seguimiento a los proyectos, contrastar y dialogar con los catequistas y religiosas que colaboran en ellos. Conocer de primera mano las becas a universitarios y universitarias de Mufunga que, entre otros proyectos se realizan gracias a la colaboración de muchos cristianos y cristianas de nuestras diócesis
Iñigo nos cuenta las contradicciones del progreso en un país como el Congo, en el que es fácil conectarse con el mundo exterior e incluso seguir los partidos del mundial en diversas cadenas gratuitamente, «mientras hay carreteras sin asfaltar o las casas no disponen de agua corriente». Hay también gente muriéndose de cólera «que fundamentalmente mata a los más pobres».
“Es una realidad compleja en la que hace un mes han abierto formalmente, para su explotación, una de las minas de oro más grandes de África mientras puedes encontrar a una persona muerta al lado del camino «como nos ocurrió a nosotros al llegar aquí, sin que nadie pasara a recogerla.”
Tuvieron un impresionante y emocionante recibimiento. Una de las razones de esta bienvenida, nos cuenta Iñigo, ha sido la gran labor que han realizado los misioneros, entre los que se encuentra Luis Mari Gerrikagoitia, por «devolverles la dignidad. Los misioneros vascos trabajaron allí plantaron las semillas que han ido dando sus frutos. Cuestiones prácticas como la construcción de 25 kilómetros de carretera con gente voluntaria o temas pastorales, como la formación de catequistas y agentes de pastoral «que recorren una extensión como Bizkaia y Navarra juntas para evangelizar han sido algunos de los resultados del acompañamiento que han realizado los misioneros en la zona.
Paulo Mukaza dice
Mis recuerdos y muchas gracias…..MMDDVV